Todas las personas experimentamos estrés y a veces puede ser abrumador. La vida cotidiana frenética genera a menudo exceso de preocupaciones y obligaciones: el trabajo, el dinero, los problemas familiares son solo algunas de las cosas que pueden causar estrés.
Es común llegar a considerar que reducir nuestros niveles de estrés es imposible, que nada puede cambiar. Sin embargo manejar es posible y es una cuestión de hábitos.
CÓMO SÉ QUE ESTOY SUFRIENDO DE ESTRÉS?
La señales del estrés pueden ser diferentes de persona a persona. Sin embargo entre las síntomas del estrés podrías experimentar:
dolores de cabeza
falta de concentración
dificultad en memorizar
sensación de nerviosismo o irritabilidad
palpitaciones
tensión muscular (mandíbula apretada, rigidez en el cuello..)
sentimiento persistente de aprensión o temor que no desaparece y que interfiere en la forma en que llevas tu vida (ansiedad)
El estrés puntual (deber enfrentar un examen, presentar un trabajo...) no supone un problema para tu cuerpo, que está bien equipado para manejarlo gracias a la liberación de hormonas cómo la adrenalina que te ayudarán a actuar con celeridad.
Sin embargo si tu estrés es constante cada día, puede contribuir a empeorar diversos problemas de salud, entre ellos trastornos digestivos, dolores de cabeza, trastornos del sueño y otros síntomas.
CÓMO PUEDO MANEJAR EL ESTRÉS?
Si te sientes abrumado por el estrés, es el momento de tomar acción. Antes de llegar a la toma de medicamentos, puedes empezar a manejar el estrés introduciendo nuevos hábitos en tu día a día. Si tienes dificultades en mantener una constancia en la práctica de estos hábitos, ponte en contacto conmigo. Juntos crearemos una estrategia que te ayudará a alcanzar tu objetivo de reducir tus niveles de estrés y sentirte mejor.
Estas medidas te permiten activar la respuesta de relajación de tu organismo. En contraste con la respuesta de estrés, la respuesta de relajación reduce el ritmo cardíaco y la presión arterial y disminuye el consumo de oxígeno y los niveles de hormonas del estrés.
Estas son algunas prácticas que puedes incorporar desde ya para manejar el estrés:
Escribe un diario, pon por escrito lo que deseas lograr y lo que no quieres más en tu día a día
Identifica tus pensamientos negativos e inútiles y ponte como meta superarlos
Enfócate en respirar profundamente y de forma consciente
Recorta momentos para relajar tu cuerpo, zona por zona
Cultiva habilidades para mantener la atención enfocada y clara y desarrollar una mayor conciencia del presente
Recurre a videos de meditación
Haz ejercicio de forma regular
Permítete tiempo de recreo, practica tu hobby o las actividades que te hacen estás bien
Reduce tu consumo de azúcar y bollería, déjate ayudar por un nutricionista a encontrar una estrategia y conseguir el objetivo
Mejora tu alimentación en general
Sustituye el consumo de redes sociales con ejercicio al aire libre o caminar en la naturaleza
Dedica 10 minutos al día a ir descalzo o a poner los pies en la tierra
Escucha música de frecuencia alfa o 432Hz
Te aseguro que incorporando hasta una sola de estas actividades a tu día, experimentarás una abundante mejora en cómo te sientes.
Recuerda que siempre tienes el poder de reducir tu estrés, sólo hace falta un propósito claro y un plan para ser constante en la práctica. Si necesitas ayuda, te ofrecemos un programa de 4 semanas con clases online que te ayudarán a aprender herramientas para volver a encontrar la calma. Si tienes preguntas o quieres empezar ya el programa, ponte en contacto conmigo.
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